Versos acerca de la vida.
La vida es el miedo que de noche reconozco.
Estoy en mi cama y mis pensamientos, vertidos en el ayer o tal vez en el mañana,
me declaran que la suerte no me ha dado nada.
La vida es una fogata depravada, y yo me aferraba a ella buscando salvación para mi alma,
sin darme cuenta de que poco a poco sus brasas mi alma de papel consumían.
La vida... es algo más que el tren, tal vez sea la vía
o el camino que recorremos tratando de encontrar una verdad finita
que trate con amor nuestra mente marchita.
La vida a mí no me ha dado nada, a mí solo me archiva.
Pido ser uno más de la fila como todos los demás,
pero ella mira dentro de mí y conoce todas mis filias.
La vida a mí no me ha dado nada, se revuelve dentro de mí
como un sismo de quinta escala.
La agonía es severa: es lo único que hay mientras miro por mi ventana.
La vida es una mujer linda pero cobarde.
Ya me aburrí de ver las mismas paredes, la misma puerta y la misma cama.
Ya quiero otro paisaje, pero no quiero esa basura amarga de atardeceres y montañas,
solo quiero lo que todos quieren: una vida estúpida llena de placeres.
La vida me ha tratado con indiferencia.
Le pedí una muerte rápida y me ha dado una vida lenta.
No entiendo siquiera cuál es la diferencia.
Camino a raíz de mi propia ciencia
que me hace querer un día más aunque tan especial no sea.
La vida, hermano, duro me ha tratado.
Me dio crudeza y espanto.
Yo se lo he devuelto en arte.
Así mismo, yo le pido sexo y ella solo me da onanismo.
La vida es un sismo y yo creyendo en estupideces como los signos.
Veo sus conversaciones y digo: “Pobrecitos”,
porque las estrellas del cielo nada tienen que ver con nuestra pobreza.
Es más, tal vez nos vean como proezas
y busquen en nuestro color pálido un ídolo a quien servir.
La vida le ha sido buena a algunos, pero no a mí.
Si no fuera por esta resaca… ¿cómo podrían diferenciarme de un muerto?
Oscuridad para los muertos y velas para los vivos:
de esa manera toda esta basura tuviera más sentido.
Si no fuera por ese dolor que sentimos,
¿cómo carajo vamos a saber que estamos vivos?
La vida es más que un destino, querido.
La vida es el rabo de perro que perseguimos.
O esto no tiene sentido,
o tiene más de uno.
¡Eso es!
La vida solo es un chiste de doble sentido.
Doblemente el dolor sentimos
si a la crudeza del amor también nos sumergimos.
La vida y el amor tal vez sean lo mismo:
las únicas dos penas que sentimos.
La vida tal vez solo sea pena,
pero si en algo se coincide, entonces enhorabuena.
Pero no se vuelve buena...
solo se aplaza hasta una nueva cancha.
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